miércoles, 20 de mayo de 2020

Ponencia. El Papel Del Cyborg Dentro Del Movimiento Feminista


Universidad pedagógica nacional
Lic. En Filosofía
Oscar Nicolas Méndez Ortiz
2015232022

El Papel Del Cyborg Dentro Del Movimiento Feminista

Este escrito tiene como fin es cuestionar ¿Por qué es importante fundamentar el mito cyborg dentro del movimiento feminista? Para resolver esta pregunta partiré del análisis de la lectura del libro “Ciencia, Cybors y mujeres” de la filósofa norte americana Donna J. Haraway.  Realizando énfasis, en el análisis del sexto capítulo denominado “Manifiesto para cyborgs: ciencia, tecnología y feminismo socialista a finales del siglo XX”. Para resolver esta pregunta dividiré este texto en tres partes. Primero, realizare una breve reconstrucción del contexto histórico que motivo las construcciones de mito cyborg. Luego, se analizarán algunas de las características principales de los cyborgs. Para finalizar, se dará respuesta a la pregunta que motivo este escrito.  

La Crisis dentro de la categoria de mujer.

Para Haraway, la causa de la fragmentación del movimiento feminista se encuentra en la ambigüedad que existen dentro del concepto mujer. Concepto que parece fundamental para el desarrollo de una identidad política, pues se muestra como matriz que permite unificar el movimiento. Pero, que resulta ser una herramienta para la exclusión y el sometimiento de la mujer, incluso dentro del mismo feminismo, como es el caso del feminismo Terf[1].  Para la filosofía, esto se debe principalmente a que este concepto es una construcción social, el cual nace del discurso científicos-sexuales y tiene diferentes matices dependiendo del lugar de enunciación de cada persona. La experiencia de ser mujer dependerá de muchos factores sociales como la clase social, la raza o la genitalidad[2]. Provocando que cada experiencia sea diferente. Incluso, que resulten contradictorias al ser contrastadas, generando diferencias que parecen ser irreconciliables. Un ejemplo de esto se encuentra en el caso del lugar que ocupaban las mujeres negras dentro de los movimientos feministas blancos, a finales del siglo XX.  Los movimientos feministas gestados por las mujeres blancas, ni por los movimientos en pro de los derechos de los hombres negros, lograban representar todas las necesidades que exigía esta parte de la población, quienes sufrían un doble proceso de marginación, un lado por ser mujer y también por ser afrodescendiente.

“La categoría «mujer» negaba a todas las mujeres no blancas; «lo negro» negaba a toda gente no negra, así como a las mujeres negras. Pero tampoco había un «ella», una singularidad, sino un mar de diferencias entre las estadounidenses que han afirmado su identidad histórica como mujeres estadounidenses de color.” (p. 266)

El tratar de unificar los movimientos feministas bajo el concepto de mujer, a constituido uno de los mayores problemas dentro del movimiento, pues ha provocado procesos de apropiación y totalización. Ignorando o excluyendo una parte de la población, quienes usualmente son los más oprimidos, para centrar la lucha en restituir los derechos de solo una parte del movimiento, garantizando alcanzar el telos establecido por la mayoría.   Dona Haraway, realiza fuertes criticas a dos de los grupos feministas dentro de la historia del movimiento estadounidense. El feminismo marxista socialista y el feminismo radial, especialmente la vertiente representada por MacKinnon.
Por un lado, el feminismo marxista socialistas, es un movimiento que cómo su nombre lo indica nace de las reflexiones y categorías de Marx, para fundamentar su pugna política. Este movimiento intenta establecer una unidad del movimiento mediante la ampliando el concepto de trabajo. Instituyendo como criterio de identificación todas las actividades que socialmente se les asignado a las mujeres, como “el trabajo de las mujeres en el hogar y la actividad femenina como madres (es decir, la reproducción en el sentido feminista socialista).” (p. 270).  Es decir, esta postura abogaba más por la remuneración de este tipo de actividades, pero no el derecho de elegir realizar estas labores.

Por otro lado, el feminismo radical se le realizan dos críticas. La primera, apunta a la pretensión de realizar una taxonomía de los movimientos.  Ante la necesidad de mostrar cómo se ha dado las luchas feministas, algunos académicos y militantes han intentado mostrar las luchas feministas como un movimiento uniforme, el cual obedece a unas metas establecidas, denominadas las olas del feminismo. Esta postura, desconoce las diferencias ideológicas y de exigencias que existen del movimiento, al tratar de imponer una lógica teológica. Ignorando que estas luchas no se dan en simultaneidad y no obedecen a las categorías ontológicas ni epistemológicas establecida por los académicos.  La segunda critica nace de la forma como se define la mujer.

“MacKinnon dice que el feminismo adoptaba necesariamente una estrategia analítica diferente del marxismo, contemplando primero no la estructura de clase, sino la de sexo/género y su relación generativa, la constitución de los hombres y la apropiación sexual de las mujeres. Irónicamente, la «ontología» de MacKinnon construye un no-sujeto, un no-ser. El deseo de otro, no el trabajo del yo, es el origen de la «mujer».” (p. 272)

Haraway nos advierte que, dentro de esta postura, la figura de la mujer es reducida a una construcción en base del deseo del hombre. A diferencia de la postura marxista en donde la mujer tomaba conciencia por medio de su trabajo, como lo hace cualquier otro proletario. La postura del feminismo radical destruye todas las posibilidades de emancipación. Pues postula el concepto de mujer como una construcción que nace desde la proyección que el hombre tiene de ella, quitándole incluso el estatus de sujeto. El feminismo radical, es una propuesta totalizadora la cual no solo niega la diferencia dentro del movimiento feminista, también niega la misma lucha, marginalizando a las mujeres en un producto mas del hombre.

Un nuevo mito, los cyborgs.
Ante este escenario escalofriante en donde nos muestra que las dificultades que tiene el movimiento feminista para unificar nacen desde la ambigüedad del concepto de mujer. Donna Haraway postula la creación de un nuevo mito, el sustente un nuevo tipo de identidad la cual logre superar las barreras impuestas por el género, la raza y clase, que son los principales obstáculos que impiden que el movimiento feminista logre su unidad.  El mito del ciborg.
Para empezar, es necesario definir al mito cyborg como una propuesta política, la cual busca realizar cambios profundos en la forma como se organiza sociedad. Trasformando desde la relación que existen dentro del Oikos, hasta modificar las relaciones entre la cultura y la naturaleza. Es una propuesta trasgresora la cual pone en juicio muchos de los límites que cimentan al mundo construido por el hombre moderno. Límites los cuales fundamentan nuestras practicas sociales, tales como: el género, la raza, la diferencia entre hombre y los animales, la idea y lo material, entre otros.
Este mito, costa de tres características claves. Primero, es una ironía la cual intenta mantener unidas contradicciones, sin pretender sobreponer alguna. Es jugar con los dualismos y las contradicciones establecidos por la sociedad, mostrando que sus límites son imaginarios.  El mito ciborg nace entre las grietas del movimiento feminista, tratando de establecer canales entre las diferentes voces que conforman estos movimientos, las cuales presentaban diferencias fundamentales, sin las pretensiones de subordinar ningunos de sus actores.  
Por otro lado, también es una blasfemia. Esto tiene una doble implicación: Primero, sirve como escudo para defenderse ante los ataques de los defensores del estado patriarcal, moralistas conservadores que intentan mantener las condiciones actuales. En segundo lugar, es una renuncia a los mitos fundamentales de la sociedad. No reconoce mas las promesas del paraíso ni de una unidad original, es una creatura del mundo postgenérico. Como consecuencia, el ciborg no tiene génesis ni telos definidos, no cae en el sueño inocente de entrar en comunión con su creador, como el monstruo de Frankenstein. Además, tampoco tiene el miedo de sufrir las consecuencias de trasgredir los limites impuestos por su creador, no tiene miedo al apocalipsis, pues es el quien provoca el fin del mundo del hombre moderno.  Esto provoca que tenga una capacidad de trasformar al mundo, pues al no haber nada preestablecido, existe la capacidad de modificar las relaciones que tiene con el mundo. De trasgredir los limites y modificar las relaciones, poniendo en duda o borrando los limites socialmente aceptados, como es el caso entre la división entre animales y hombres, o entre humanos y maquinas.
“El cyborg no reconocería el Jardín del Edén, no está hecho de barro y no puede soñar con volver a convertirse en polvo. Quizás sea por eso por lo que yo quisiera ver si el cyborg es capaz de subvertir el apocalipsis de volver al polvo nuclear mediante la compulsión maniaca de nombrar al Enemigo. Los cyborgs no son reverentes, no recuerdan el cosmos, desconfían del holismo, pero necesitan conectar: parecen tener un sentido natural de la asociación en frentes para la acción política, aunque sin partidos de vanguardia.” (p. 256)

La última característica es su naturaleza. El cyborg es definido como un ser “un híbrido de máquina y organismo, una criatura de realidad social y también de ficción” (p. 253) Esto quiere decir, que la identidad del cybors está constituida por la ironía. La colisión de dos categorías que se consideran contradictoras, que parecen irreconciliables. Como es el caso, la naturaleza con el mundo tecnológico. Además, la realidad social, que se puede entender como todas las relaciones que establecemos en el contacto con el demás, y la ficción, como el creer los mitos fundacionales, como el concepto de mujer.  Esta naturaleza dual, produce que el cyborg tenga una alta capacidad de establecer lazos con el otro, sin importar las diferencias que existen entre los dos, como es el caso de los animales.

Conclusión
Teniendo en cuenta lo expuesto en los dos apartados anteriores, es válido afirma que el mito cyborg, nace como la respuesta a la pregunta, de como unificar al movimiento feminista sin poder utilizar la categoría de mujer. Este mito es impórtate, pues, intenta generar una identidad política en el movimiento, la no excluya o invisibilice alguna de las partes del movimiento. Es decir, se intenta superar el error del feminismo radical, el cual era totalizante e invisibilizaba una parte del movimiento. Ni muchos menos, caer en el error crear en concepto de identidad de forma tan reducida, que termine excluyendo parte del a población, como sucedía con los movimientos feminista bancos o el feminismo Terf.
Por otra parte, me parece muy interesante la articulación que realiza entre los movimientos sociales y el avance tecnológico. Dos campos que parecen estar constantemente en pugna, em especial para los ojos de algunos teóricos o activistas ambientales, los cuales denuncian que el desarrollo tecnológico está teniendo fuertes impactos negativos, tanto para el medio ambiente, como para el desarrollo de las relaciones sociales. Para algunos autores, la relación que tenemos con la tecnología altera las formas como nos relacionamos con los otros, provocando que nos convierte en seres más dependientes del sistema capitalista e impidiendo la consolidación de movimientos sociales, como el feminismo. Sin embargo, que dentro del mito cyborg, Donna Haraway logra reconciliar, demostrando que estos desarrollos tecnológicos, pueden ser usados como estrategias poderosas, que ayuden a consolidar un movimiento social el cual logres trasformaciones fundamentales en nuestra sociedad. La verdad me hubiera gustado poder profundizar un poco mas en esta idea. Sin embargo, por cuestiones de espacio y extensión del texto no puedo. Por lo tanto, la dejo como una cuestión abierta, para debatir dentro de la sesión.










[1] Es una rama del feminismo, el cual se muestra como oposición ante las personas transgénero.
[2] Entiendo como genitalidad, el órgano sexual que es determinado de forma aleatoria por la bilogía. Lo cual es diferente al género que la persona decida tener. Aunque Donna Haraway no realiza esta distinción, si creo esta idea rondado a lo largo del texto, en especial cuando habla de la relación que tiene el cyborg con su sexualidad.

jueves, 7 de mayo de 2020

Co ponencia de Angie Bernal y Camila Torres


Comentario Ponencia de Angie Bernal  

Para comenzar, quiero resaltar la introducción que realizo Angie sobre el contexto de Donna Haraway y los problemas que motivaron esta discusión. Pues, al conocer la historia de la autora, no solo nos ayuda a entender el origen de la crítica sobre el concepto de objetividad y la forma como se desarrolla el conocimiento dentro del mundo científico y filosófico. También, nos muestra la pertinencia de esta crítica, pues su historia es un testimonio de la lucha que muchas mujeres y hombres que no son blanco y/o heterosexuales, tienen que realizar por ganar un lugar dentro del mundo académico. Un lugar, que se supone que debería estar abierto a todos, pero que es dominado por hombres blancos privilegiados, los cuales utilizan a la academia como un bastión para la defensa del dominio que ejercen sobre los otro, en este caso específico, sobre una mujer blanca.
Creo que es un significativo que Dona Haraway, desde el inicio de su escrito, nos exprese el resentimiento que siente por el mundo académico. No es en vano, que la autora compare al mundo académico con un campo de batalla, donde los sujetos son educados para luchar descarnada para defender sus creencias, pasando por encima del otro, sin tomarse la molestia de escuchar primero que dice, como lo dice, ni por qué lo dice. Rompiendo de facto, toda posibilidad de entablar un dialogo, pues dentro de sus criticas des-legitiman el conocimiento del otro, por su lugar de enunciación, por no ser objetivos.   Por esto creo que investigar el contexto el autor dentro del proceso de analizar su pensamiento, es un paso necesario y coherente con la propuesta de objetividad propuesto por autora, del conocimiento situado.  
Adicionalmente, me parece muy interesante y pertinente el ejemplo planteado en la ponencia, sobre la crisis del covi-19. Pues pone en evidencia los problemas que implican, la forma como se educan los académicos y se desarrolla el conocimiento. Es sorprendente el observar, que ni siquiera la actual coyuntura logre convocar a toda la comunidad científica para el desarrollo de una vacuna o tratamiento efectivo contra el coronavirus. Aunque estén muriendo muchas personas, los egos y las pretensiones de poder de las diferentes potencias, conviertan el desarrollo científico en una carrera por la gloria y el domino, impidiendo la colaboración en pro de salvar vidas.
Por otro lado, me interesa mucha las preguntas que postulo al final de la ponencia y me gustaría unirme al debate al proponer una respuesta a la tercera pregunta, la cual me parece muy importante, pues cuestiona directamente la forma en que nos educamos. ¿Hay que fundamentarse primero teóricamente sobre lo que dicen algunos filósofos ilustres y luego si pensar de forma situada… o al contrario?
Creo que es un error el priorizar los procesos de fundamentación teórica frente al desarrollo de una vos propia.  Aunque no quiero des-legitimar los procesos de fundamentación teórica, los cuales son muy importante dentro del quehacer filosófico cuando se participa dentro de una discusión. Pues, los problemas filosóficos no nacen espontáneamente, todos están inscritos dentro de una tradición filosófica.  Además, dentro del ejercicio de análisis de un problema es importante escuchar diferentes voces, en especial la de aquellas personas que tiene aportes muy importantes dentro de la discusión y por ende gozan de un reconocimiento dentro de la comunidad académica.
Sin embargo, desde mi experiencia dentro de la carrera, conversaciones que he tenido con algunos compañeros y profesores, he notado que en muchos estudiantes (entre los que me incluyo) existe un problema muy fuerte de confianza lo cual impide tener una actitud propositiva frente a las discusiones.  La idealización de algunos autores, los cuales gozan de una de un reconocimiento muy fuerte dentro del mundo académico y el miedo a recibir escarnio público por decir algo que sea rechazado por la comunidad o el docente, impide que muchos estudiantes se atrevan a seguir sus intuiciones y criticar a un autor.  
Esto provoca, que muchos estudiantes nos veamos en la tediosa tarea de escribir en pro de lo que los otros quieren escuchar y no realmente en lo que creemos o sentimos. Es lamentable, pero usualmente es más cómodo y se ve mejor recompensado (en la calificación final y en la relación con algunos docentes) el apegarse al texto, impostando la vos del autor estudiado, repitiendo como loros las disertaciones que los autores canónicos dicen. Este error de quedarnos en una zona de confort, no solo se impiden el desarrollo de la discusión, pues de facto se esta negando una postura diferente que puede enriquecer fuerte mente el debate. También genera grandes problemas dentro del proceso formativos, los cuales se vuelven evidentes, cuando se nos pide realizar una ponencia, participar en debates o comenzamos a realizar la tesis.



domingo, 3 de mayo de 2020

Mi experiencia durante la cuarentena



Un día más acaba de iniciar, otra vez los primeros rayos del sol, que se cuela por la ventana de mi cuarto, golpean mi rostro y gracias a esto me doy cuenta de que acabo de pasar otra noche siendo presa del insomnio. Otra noche no puedo dormir por la ansiedad de ver como el mundo arde a mi alrededor, y con él se evaporan mis ilusiones de tener un mañana mejor, igual como se desvanece un cubo de hilo en un vaso de whisky. La verdad no se muy bien que día es hoy. Desde que inicio la cuarentena siento que vivo sumergido en un mundo extraño. Lo cual no es malo en sí mismo y era algo que esperaba, pues el estilo de vida de la sociedad occidental era insostenible y solo era cuestión de tiempo para que un gran cataclismo, provocado por el cambio climático o algún conflicto armado escalonado, cambiara la vida de todos. No obstante, el desear este cambio no implica que adolezca por todo lo que sucede a mi alrededor.
En este nuevo tipo de vida, el cual es marcado por el miedo de ser contagiado con el covi-19, he tenido mucha suerte. Soy muy afortunado, pues gracias al apoyo de mi familia no he pasado ninguna necesidad económica. Tampoco afectiva, por un lado, cuento con mi familia, con los cuales he afianzado mis lazos emocionales y cada día nos acercamos más, a tal punto que no he vuelto a tener conflictos con ellos. Algo que, en condiciones normales por la rutina que tenemos cada uno no hubiera pasado. Por otro lado, constantemente estoy en contacto con mis amigos por medio de las redes sociales, lo cual me ayuda a despejar la mente, cuando siento que comienzo a ser invadido por la ansiedad al pensar en el mañana. Además, durante este tiempo de aislamiento he logrado realizar actividades que disfruto, pero que tenía aplazadas por la rutina, como retomar la rutina de la guitarra, ver algunas series de televisión y leer algunos libros que tenia en la lista de espera.  
Sin embargo, aunque la vida es buena conmigo no puedo ser feliz ni pasar este momento con tranquilidad. El ver noticias relacionadas con la crisis sanitaria se a convertido en un martirio. Cada día se vuelve más insoportable al observar impotentemente el mal manejo que los gobiernos de diferentes países tiene de esta situación, y estos sentimientos se intensifican cuando veo las noticias de mí país.
 Me parece increíble ver en los medios de comunicación, como diferentes figuras públicas, como el sub-presidente Duque, toma decisiones para enfrentar la crisis las cuales no ayudan para nada a quien más lo necesitan. Acciones las cuales solo ayuda a los grandes empresarios, sus amigos y acreedores mientras dejando morir a las personas más necesitadas, la mayoría de las personas que realmente mueven este país.  Prefieren dar dinero a los bancos y empresas privadas, mientras la gente se muere de hambre en sus casas o se tiene que arriesgar a salir a rebuscarse la comida y condenarse a morir por el covi19. Ni hablar, de como invierten exorbitantes sumas de dinero para reforzar las fuerzas de represión, el ESMAD, mientras los funcionarios de la salud tienen que luchar esta guerra contra el coronavirus, sin ni siquiera contar con los materiales necesarios para mantener a salvo sus vidas.
Es muy doloroso y desalentador, observar como un gobierno que estaba sumergido en la ingobernabilidad, que estaba constantemente en jaque por los movimientos populares, hoy aprovechando la crisis sanitaria logra gobernar con total impunidad.  Que en medio de uno de los peores escándalos políticos, los cuales ponen en duda la legitimidad del gobierno y muestran claros vínculos con el narcotráfico y el paramilitarismo, este gobierno sigue tomando decisiones controvertidas y déspotas, ignorando las acusaciones realizas y a la opinión publica. Aunque todos esta en su contra, el gobierno es más fuerza y toma decisiones fundamentales para el futuro de todos. Destruyendo las posibilidades de un futuro mejor y deslegitimando el poder de las instituciones estatales y la división de poderes.  Otra vez el miedo les permite a los gobiernos fascista gobernar a voluntad, ignorando la voluntad del pueblo que en teoría representa.  Ante este panorama desolador, lo único que puedo pensar, es sobre ¿qué sentido tiene seguir manteniendo esta farsa?, ¿cuánto tiempo seguiremos aguantando los abusos de este gobierno, en el cual nos roban el futuro descaradamente en la cara? ¿será que solo es cuestión de tiempo falta para volver a la guerra descarnizada que ha marcado la historia de este país?
Desde pequeño he escuchado que no hay males que duren mas de cien años, ni cuerpos que los resistan. Lamentablemente hoy más que nunca dudo de este dicho y me sumerjo en el fatalismo. Siento como la oscuridad invade mi alma y me quita todas las ilusiones de seguir adelante. Mis fuerzas se desvanecen y me sumerjo cada vez más en mis pensamientos. Sin embargo, antes de caer en una terrible tristeza, una voz conocida llama mi puerta y me invita a tomar el primer café de la mañana. Esta voz que me acompaña desde niño es como un rayo de luz que logra disipar todo el malestar que me afectaba y me recuerda por que debo luchar, lentamente salgo de mi cama y recuerdo que, aunque la situación se ve muy lúgubre, es necesario seguir luchando, no me puedo dar por vencido.